El 18 de diciembre de 2022 la selección argentina de fútbol obtuvo su tercera Copa del Mundo, luego de 36 años de espera. De inmediato una multitud enfervorizada salió a festejar en las calles de todo el país: hombres, mujeres, niños, ancianos y familias dieron a luz un ritual de felicidad, pasión, orgullo y emociones completamente fuera de control. Dos días después, los jugadores campeones arribaron al país y su caravana movilizó a 5 millones de personas en la Ciudad de Buenos Aires.
Fui parte de ambas jornadas como hincha y como fotógrafo, sumergido en una marea humana empapada de alegría, abrazos, cantos, cerveza, agua y «nieve loca», que nos bañó a todos en un sentimiento de unión y plenitud.
